La adquisición de una casa valorada en S/3.3 millones por Ana Paula Ganoza, esposa del excongresista y secretario general de Alianza Para el Progreso, Luis Valdez, ha levantado sospechas. El mini noticiero digital «La Encerrona», reveló nuevos datos interesantes sobre el caso. La mansión fue adquirida en una subasta pública después de ser incautada al exgobernador del Callao, Félix Moreno, quien ahora está en prisión. Esta subasta involucró a varios postores relacionados con Valdez, generando más interrogantes sobre la legitimidad del proceso.
Entre los participantes de la subasta estaba la empresa PACTA SAAC, propiedad de Guillermo Aliaga que fue congresista en el mismo periodo que Valdez y además es su actual socio, también es representante de otra empresa postulante, Apu Exploration Solutions. Esta relación empresarial y política ha despertado aún más dudas sobre la competencia real durante la puja por la propiedad.
Además, en la subasta apareció Carlos Yturry Mamani, otro empresario con vínculos cercanos a Valdez, quien compitió activamente por la adquisición de la propiedad. Iturri es dueño de Obritec, una empresa contratista de Hidrandina, que opera en La Libertad, región que Valdez gobernó. Esta serie de conexiones sugiere un posible conflicto de intereses en la adquisición de la mansión.
Otro hecho relevante es la reciente designación de Rudolf Salgado, militante de Alianza Para el Progreso y egresado de la UCV, como coordinador administrativo del Programa Nacional de Bienes Incautados (Pronabi), entidad responsable de la subasta. Salgado, cercano a Valdez, fue nombrado solo meses antes de la subasta, lo que suma más elementos a las sospechas sobre la transparencia del proceso.
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