La noche del martes 21 de junio, se registró un terremoto de magnitud 5.9 a unos 46 kilómetros de Khost, capital de la provincia homónima, al este de Afganistán.
Las autoridades afganas anunciaron que al menos 1 000 personas fallecieron a causa de este fuerte movimiento telúrico. Además, señalaron que continúan con la búsqueda de supervivientes. Esta es la mayor catástrofe que está viviendo el país asiático desde la llegada de los talibanes al poder.
La provincia de Paktika ha sido la más afectada, según Mohamad Amin Huzaifa, jefe del servicio de Información y Cultura. “El balance llegó a los mil muertos y esta cifra aumenta. La gente cava tumba tras tumba”, expresó a los medios de comunicación.
También señaló que en los distritos de Gatan y Barmal más de 1 500 personas han resultado heridas. Se espera que el número de fallecidos aumente en las próximas horas, según las informaciones recogidas por la agencia estatal afgana de noticias, Bakhtar News Agency.