Trujillo, Perú – En medio de una creciente preocupación por la seguridad, los cursos de manejo de armas en Trujillo han sido suspendidos debido a la falta de reglamentación de una ley crucial.
La Ley 31615, que modifica la Ley 28879 de seguridad privada, aún no ha sido reglamentada, a pesar de que se promulgó hace más de ocho años. Según uno de los instructores afectados por esta situación, el artículo 11 del decreto legislativo 12 13 ha sido modificado, pero la reglamentación requerida no se ha establecido. «La reglamentación debió hacerse en 90 días, pero hasta ahora no sale. Esto está perjudicando a los agentes de seguridad y a la ciudadanía que quiere ser agente de seguridad», afirma el instructor.
Además de los futuros agentes de seguridad, las empresas también están sufriendo debido a la falta de cursos de capacitación. Carlos, otro instructor de Trujillo, explica que las empresas que licitan para contratos de seguridad deben proporcionar la documentación necesaria para sus agentes de seguridad. «Al no tener curso, las empresas tampoco pueden licitar con ninguna entidad», dice Carlos. «Esto está perjudicando al ciudadano que quiere trabajar, a los instructores, y también a las empresas».
Los instructores de estos cursos son, en su mayoría, oficiales retirados de las fuerzas armadas con años de experiencia en el campo de la seguridad. «Somos personas calificadas. Nos han tomado exámenes, y tenemos alrededor de quince años como instructores«, señala uno de ellos.
Además de la suspensión de los cursos de manejo de armas, la falta de reglamentación está llevando a una situación potencialmente peligrosa. Algunas empresas están contratando personal sin documentación, lo que representa un riesgo para la seguridad. Además, sin los cursos de capacitación, los ciudadanos que quieren obtener una licencia de armas no pueden hacerlo.
Actualmente, en la región de La Libertad, hay alrededor de diez instructores afectados. Sin embargo, a nivel nacional, el número es mucho mayor, con más de 350 instructores en todo el país. La responsabilidad de reglamentar la ley recae en la PCM (Presidencia del Consejo de Ministros), que hasta la fecha no ha tomado medidas para resolver la situación.
Conclusión: La reglamentación de la Ley 31615 es esencial para garantizar que los futuros agentes de seguridad en Perú estén debidamente capacitados y puedan trabajar en el campo de la seguridad. La falta de acción por parte de la PCM no sólo está afectando a los instructores y a los futuros agentes de seguridad, sino que también está creando una situación de riesgo para la seguridad en general. Es imperativo que se aborde esta situación lo más pronto posible para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los peruanos.
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