Este 19 de mayo, el mercado la Hermelinda amanece abarrotado de gente entre tantos puestos de comida al paso, encontramos al señor huber quien vende caldos. Para todos los gustos y bolsillos. Este negocio que maneja desde hace 30 años le ha permitido sacar adelante a su familia.
Los comensales que laboran cerca al centro de abastos, acuden todos los dias por sus dosis de energía. Caldos de gallina, pollo, carnero y cabeza son los preferidos del público y eso se refleja en los 200 platos que el señor huber vende a diario.
El trabajo de preparación de estos potajes empiezan desde la medianoche y se extiende hasta el mediodia. El señor huber sabe que todo esfuerzo tiene su recompensa. El empezo desde cero y ahora se puede decir que es un hombre de éxito.