Este martes 12 de abril, Joe Biden, presidente de Estados Unidos, acusó al presidente ruso, Vladimir Putin, de cometer un «genocidio» en Ucrania. Además, lo describe como un «criminal de guerra» y pidió que enfrentara un juicio sobre las supuestas atrocidades.
Biden se refirió así de Putin durante un discurso sobre el alza de los precios, al decir que la capacidad de los estadounidenses para llenar su tanque de gasolina no debería «depender de si un dictador declara la guerra y comete un genocidio» en otra parte del mundo. Pues el gobierno de Biden atribuye el aumento del precio de la gasolina a la invasión rusa de Ucrania.
«Sí, lo llamé un genocidio», dijo Biden a los periodistas que viajaron con él a Iowa, estado de EE.UU., cuando le preguntaron sobre el término que usó en un discurso dado más temprano el mismo martes.