El miércoles 7 de diciembre del 2022, el Congreso tenía planeado debatir y votar sobre la tercera moción de vacancia presidencial contra Pedro Castillo. La moción fue respaldada por 67 legisladores y admitida para debate con 73 votos a favor. El presidente estaba citado para comparecer ante el pleno a las 3 de la tarde.
El día anterior, el 6 de diciembre, se supo que Salatiel Marrufo, exjefe del gabinete de asesores del Ministerio de Vivienda, solicitó acogerse a la colaboración eficaz. Ante el despacho de la fiscal Marita Barreto, Marrufo confirmó la recepción de sobornos por parte de la empresaria Sada Goray para él, el ministro Geiner Alvarado y el presidente Pedro Castillo.
Mensaje a la Nación
El 7 de diciembre de 2022, Pedro Castillo, acusado de corrupción, tomó la decisión de emular una dictadura sin el respaldo de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. A las 11:41 a.m., inició su mensaje a la nación para acusar al Parlamento, al sistema judicial, a los medios de comunicación y otras instituciones de los problemas de su gobierno. Luego, con manos temblorosas, visiblemente sudorosas y una voz entrecortada, anunció su golpe de Estado.
“(…) disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional. Convocar en el más breve plazo a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva constitución en plazo no mayor de nueve meses (…) se gobernará mediante decretos ley, se decreta el toque de queda a nivel nacional (…) se declara en reorganización el Sistema de Justicia, el Poder Judicial, el Ministerio Público, la Junta Nacional de Justicia, el Tribunal Constitucional” expresó en su mensaje a la nación.
Pedro Castillo, acusado de corrupción, decidió cerrar temporalmente el Congreso y decretar un estado de excepción, lo que generó incertidumbre y desazón entre las instituciones públicas y la ciudadanía. Según los especialistas, su actitud respondía a su intento por permanecer en el poder y evitar las acusaciones en su contra. Los politólogos consultados sostienen que la crisis política en Perú se remonta al año 2016. El acto fue reconocido por políticos de diversas tendencias, los medios de comunicación y el Tribunal Constitucional como un golpe de Estado, y algunos lo compararon con el autogolpe de 1992 perpetrado por el expresidente Alberto Fujimori.
Menos de 20 minutos después del mensaje de Pedro Castillo, algunos ministros anunciaron su renuncia, entre ellos César Landa de Relaciones Exteriores, Kurt Burneo de Economía y Alejandro Salas de Trabajo. Otros representantes del gobierno comenzaron a dejar Palacio de Gobierno.
A las 12:27 p.m., la ex fiscal de la Nación, Patricia Benavides, se pronunció en contra de la pretensión golpista de Pedro Castillo y demandó el respeto al orden constitucional.
Sin el respaldo de la mayoría de sus ministros, de las Fuerzas Armadas, de la Policía y de los representantes de las principales instituciones, Pedro Castillo abandonó Palacio de Gobierno con su familia y su asesor Aníbal Torres a la 1:32 p.m.
Ante los rumores de que Pedro Castillo intentaría pedir asilo en la embajada de México, algunos ciudadanos llegaron con la intención de bloquear los ingresos a la sede diplomática e impedir un eventual ingreso del golpista.
El paso de la camioneta que transportaba a Pedro Castillo rumbo a la sede diplomática mexicana quedó bloqueado por la intervención de un grupo de ciudadanos que lo interceptó en medio de la avenida Garcilaso de la Vega, del Centro de Lima. Pedro Castillo fue detenido por sus propios custodios quienes bajaron de sus vehículos con armamento de largo alcance para resguardar el traslado del presidente golpista a la sede de la Prefectura de Lima.
Congreso aprueba vacancia
Mientras tanto, en el Congreso continuó la sesión del Pleno y por amplia mayoría aprobó, a la 1 y 49 de la tarde, la vacancia presidencial de Pedro Castillo.
«Votaron a favor 101 congresistas, en contra 6, abstenciones 10. Ha sido aprobada la resolución que declara la vacancia de la presidencia de la República, en consecuencia, se procederá al régimen de sucesión presidencial.», señaló José Williams el 7 de diciembre.
Dina Boluarte asume presidencia
A las 3 y 53 de la tarde, Dina Boluarte se convirtió en la primera mujer en asumir el cargo más alto del Estado: la residencia de la República.
El inicio del gobierno de Dina Boluarte estuvo marcado por los conflictos sociales. Las protestas de diciembre de 2022 y enero de 2023 para exigir un adelanto de elecciones, la instauración de una Asamblea Constituyente y la excarcelación y restitución de Pedro Castillo a la presidencia dejaron alrededor de 60 fallecidos.
«Juro por Dios, por la patria y por todos los peruanos que ejerceré fielmente el cargo de presidente de la República hasta el 26 de julio del 2026.», juró Dina Boluarte.
Pedro Castillo intentó usurpar un control inconstitucional de todos los poderes e instituciones del Estado, pero fue vacado en menos de dos horas. El expresidente afronta una prisión en medio de las investigaciones fiscales por su intento golpista y presuntos actos de corrupción de su gobierno.
Las manifestaciones mezcladas con actos vandálicos contra locales públicos y privados, dejaron como saldo la muerte de 1 policía, 6 militares y al menos una docena de civiles, además de pérdidas de 2 mil 500 millones de soles en la producción y 3 mil millones de soles en daños a la infraestructura.
Caso de Castillo actualmente
Pedro Castillo se encuentra en prisión preventiva en el penal de Barbadillo, a las afueras de Lima, desde hace un año. Se le acusa de rebelión y conspiración por su papel en los hechos del 7 de diciembre del 2022, así como de pertenencia a una organización criminal por su presunta participación como líder en una trama de corrupción en su gobierno. Sobre él pesan dos medidas de prisión preventiva, una por 18 meses y la otra por 36 meses.
Las manifestaciones que se produjeron tras la caída de Pedro Castillo dejaron pérdidas de cientos de millones de dólares en el comercio, así como la muerte de al menos 26 personas en enfrentamientos con las fuerzas policiales y el Ejército.
Seis presidentes en 4 años
Con la caída de Pedro Castillo y el ascenso de Dina Boluarte, Perú suma ya seis presidentes de la República desde 2018. La cadena de cambios en la presidencia comenzó en marzo de ese año, cuando el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski renunció al cargo antes de que el Congreso procediera a realizar una votación para destituirlo.
Kuczynski fue sustituido por su entonces vicepresidente Martín Vizcarra, quien fue removido del cargo por el Parlamento en 2020. Vizcarra fue sustituido por el congresista Manuel Merino, quien renunció al cargo cinco días después de asumir la presidencia.
En su lugar, el Congreso juramentó a Francisco Sagasti, quien gobernó el país hasta la elección de Castillo.
Desde entonces, Perú ha experimentado un cambio constante en su ejecutivo, sumando seis presidentes en menos de cuatro años. A pesar de la rotación en la presidencia, la crisis política en el país sigue siendo evidente, con la economía y la instituciones enfrentando desafíos significativos.
