Calificaron como una burla y un modo de evadir la justicia que el expresidente Alan García haya pedido asilo diplomático a la República Oriental del Uruguay el sábado. Tanto el gobernador regional Luis Valdez como el prefecto Fernando Armas señalan que no hay persecución política en el Perú.
El asilo político fue pedido por el expresidente Alan García después de que el sábado le dictaran 18 meses de impedimento de salida del país mientras la fiscalía desarrolla la investigación por lavado de activos en su contra. Piden que Uruguay deniegue el asilo porque está acusado de presuntos delitos.
El prefecto recordó la palabra peyorativa usada por el expresidente Alan García en contra de los medios que revelaron que los 100 mil dólares que le pagaron por la conferencia en sao paulo provino de la caja de sobornos de Odebrecht-
De otro lado, el gobernador y el prefecto rechazaron la agresión en contra del ex ministro Luis Alva Castro cuando fue a visitar a Alan García en la Embajada de Uruguay.
No es la primera vez que Alan García pide asilo político. En 1992, después de autogolpe de Alberto Fujimori, lo solicitó a Colombia y le concedió. El tiempo que estuvo fuera del país permitió que prescriban los delitos por los que era acusado.
