Una nueva norma prohíbe fumar o vapear en establecimientos de salud, educación, dependencias públicas, lugares de trabajo, espacios cerrados y medios de transporte público, considerados ambientes libres de humo.
Además, exige que en todos estos lugares se coloquen carteles visibles informando sobre la prohibición de fumar y vapear, subrayando los riesgos para la salud y el carácter libre de emisiones de estos ambientes.
La norma también prohíbe totalmente la publicidad, promoción y patrocinio de productos de tabaco y sus derivados, tanto a nivel nacional como internacional. Esto refuerza la protección de la salud pública ante el tabaco y sus consecuencias.